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Título: Las lunas de Sartre
Autora: Vanessa R. Migliore
Editorial: Hidra Editorial
Páginas: 592
ISBN: 978-8418002731
Precio: 16,62€
Sinopsis
La piedra que controla la magia de las lunas ha desaparecido y la reina de Sartre está dispuesta a todo para recuperarla. Rhea es una ladrona que vive en la zona subterránea de la ciudad de Sartre, y ve en la desaparición de la piedra su única oportunidad para dejar atrás todos sus problemas y abandonar un sistema en el que no consigue encajar. Sigrid carga con las decisiones de otros y vive aferrada a un pasado inmutable. Es una guardiana solitaria que decide romper las reglas por primera vez para embarcarse en una búsqueda desesperada y así probar su valía. Para conseguir ganarse su lugar en Sartre, las dos se embarcarán en una misión que pondrá en riesgo no solo el equilibrio de una poderosa magia, sino también el futuro de la metrópolis y los planes de la reina dragón.
Opinión personal
Es muy cierto que cuando escribes la reseña de la novela de una amiga es muy complicado ser cien por cien imparcial porque, al igual que una madre, tiendes a ver todo lo que hace como algo maravilloso porque la admiras y porque la quieres. Pero donde hay talento hay talento, y eso es así. Y por más que yo admire a esta personita como amiga y como escritora, Las lunas de Sartre me ha hecho sentir tan orgullosa de su trabajo y de su esfuerzo que, sin más remedio, vais a leer una reseña llena de adulación por mi parte porque no puedo hacer otra cosa. Su esfuerzo y sacrificios han merecido, sin dudarlo ni un segundo, muchísimo la pena.
La trama de la historia gira en torno a la desaparición de la piedra del dragón, una piedra responsable de ejercer poder sobre las tres lunas y captar su influencia para transmitir poderes a los habitantes de Sartre. Rhea, Sigrid y Koruba serás las tres protagonistas, tres pilares fundamentales que nos guiarán de forma frenética a través del mundo creado por Vanessa.
Yo ya os digo, os comento y os confieso, que me cuesta muchísimo elegir a un personaje favorito. Cuando leí la novela antes de que viera la luz, creía estar convencida de que Sigrid era sin duda mi favorita, una guardiana con fuertes poderes conectados con el rayo que ha sido siempre rechazada por la traición que cometió su padre. Es una mujer muy fuerte pero a la vez tremendamente sensible, con mucha más paz interior y calma que los demás personajes, y con muchas ganas de hacer las cosas bien. Me siento siempre muy identificada con ella. Sin embargo, al volver a leer de nuevo la historia, he prestado mucha más atención a Koruba y a Rhea, y ahora ya no sé a quién quiero más.
Rhea es impulsiva, tiene tanta energía que te agotas al leer lo que le pasa por la cabeza, es tan valiente que asusta. Supongo que por eso, cada vez que deja ver una pincelada de su parte más miedosa y sensible, al final te la quieres comer con patatas. Ella nació la única noche en la que las lunas no salieron y, por tanto, no tiene influencia. Esto será algo que la marcará de por vida.
En cuanto a Koruba, he descubierto en ella a una mujer más parecida a mí de lo que creía. Es alguien que, poco a poco, te va calando sin que te des cuenta. Tiene una personalidad más pausa y calmada, más reflexiva. El hecho de que pueda comunicarse con los muertos y su forma de lidiar con ese poder, demuestran que es una persona muy madura y más consciente de las circunstancias que su buena amiga Rhea. Ambas han nacido y se han criado en los pozos, la ciudad subterránea de Sartre donde viven los más desafortunados. Totalmente en contraposición con Sigrid que vive arriba, en la superficie, y que no es consciente de las desigualdades sociales que acontecen a la ciudad por la que ella ha dado tanto.
Todo este libro es un viaje frenético entre distintos escenarios que evolucionan y cambian igual de rápido que los arcos de los distintos personajes. Siento que es muy fácil conectar con lo que pasa, que Vanessa consigue atraparte en las historias independientes de cada una, para culminar en un final que cierra perfectamente todo lo que se va cociendo durante el libro. Un viaje lleno de adrenalina, de conspiraciones y traiciones que te atrapa de principio a fin.
En innegable la evolución de Vanessa de un libro a otro. Esta es, sin duda, la obra de la que más he disfrutado y aunque se trate de un libro autoconclusivo, guardo la esperanza de que estos personajes puedan ser rescatados en un futuro en alguna nueva aventura, porque, sinceramente, son de esos personajes a los que cuesta decir adiós.
Bravo, amiga. Te has superado.
